martes, 8 de abril de 2008

Juguete roto

Se rompieron las piezas y ahora estás de rodillas y con las manos en la cabeza, como un niño, lamentándote por tu mala suerte. No fue culpa tuya, a veces pasa. Hay juguetes tan delicados que siempre corren riesgo de romperse. Pero no te preocupes, que yo recogeré los pedazos con cuidado de no quebrarlos más. Les limpiaré el polvo soplándolos uno a uno delicadamente, y los guardaré en una cajita. Después, poco a poco, iré uniéndolos con un hilo mágico, pero muy poco a poco... tardaré días, semanas, meses, quizá incluso años. Pero prometo que al final quedará como nuevo, incluso mucho más bonito que antes de haberse roto. No hagas nada, tu sólo confía en mi.