lunes, 29 de octubre de 2007

De Maldita Sentimental a Maldita Pura sólo hay un giro de moneda ;)

La semana pasada estaba yo muy “maldita sentimental”... Bajonadas ocasionales de esas típicas que todos tenemos, que no sabemos a qué son debido, y si lo sabemos preferimos no pensarlo ni decirlo. Quería dar de lado todo ese sentimentalismo pasteloso y dejar de llorar para volver a reír, pero la moneda había caído de ese lado. Y digo la moneda porque a veces soy una moneda: por una cara está la maldita sentimental, y por la otra... la maldita pura y dura. Pero a veces una simple frase hace que la moneda salte y se voltee en el aire cayendo del lado heavy jajajaja y eso ha pasado.

Leí hace unos días un artículo escrito por una mujer (mujer tenía que ser... y no dicho con tono despectivo, sino todo lo contrario) sobre el sexo; follar y hacer el amor. Cosas que yo creí tener bien delimitadas, y en el fondo lo están. Pero la opinión de esta congénere fue el golpe que volvió la moneda.

Dice la amiga que nadie folla, que el sexo siempre es hacer el amor. Yo siempre digo que hacer el amor implica sentimiento, y follar no. Pero en opinión de esta buena mujer, cuando follamos en realidad hacemos el amor, solo que nos lo hacemos a nosotros mismos. Practicar sexo nos dispara las hormonas, la libido, la adrenalina, la moral, y un largo etcétera de cosas positivas, y por ello cuando follamos nos sentimos bien... En realidad nos estamos haciendo el amor a nosotros mismos, queriéndonos, deseándonos, dándonos placer y elevando nuestro ego. Implica sentimiento, claro, pero hacia nuestra propia persona.

Llevo (llevaba...) sin hacer el amor conmigo misma o con otro desde que M me dejó. Diez ¡¡DIEZ!! largos, larguíiiiiiiiiisimos meses sin una caricia, sin un abrazo piel con piel, sin un buen polvo, para qué engañarnos. Hubo momentos en que ni tan si quiera me apetecía (en otros, me tiraba por las paredes, está claro)... soy demasiado sentimental para follar por follar... o eso creía, hasta que leí la teoría de la amiga.

El sábado la moneda se giró... y por allí pasaba J, con el que llevo hablando meses y meses y cuyas insinuaciones siempre me tomo a coña. El sábado de nuevo se me insinuó, más directo si cabe (o yo más dispuesta, que también puede ser)... y por enésima vez me propuso quedar el domingo:

- Joder tía... a ti te apetece, a mi también...¡¡quedemos!!
- Ok.

Dije que sí... accedí, pero aún con la moneda un poco de canto. El plan era quedar a comer... y si la cosa iba bien y nos apetecía, ir al postre... El domingo mientras me vestía recordé aquél post en el que perdí las alas y me vestí de cuero convirtiéndome en Maldita, con mayúsculas... y en mi cabeza sonaba AC/DC, Highway to hell. Ayer pasó lo mismo. I’m on a highway to hell... highway to hell… las medias se deslizaban por mis piernas y me sentía muy maldita… maldita me vestí, maldita me peiné, maldita me maquillé, maldita me perfumé, malditamente me excité. Subí en mi coche, seguí con AC/DC, necesitaba sentirme Maldita, muy maldita y de hecho lo conseguí... No comimos. Nos saltamos los entrantes, los primeros, los segundos y pasamos a los postres. Fui maldita pura y dura, la más maldita entre las malditas, y me sentí malditamente bien.

Ayer me hice el amor a mí misma tantas veces que perdí la cuenta de los orgasmos. Ayer me quise hasta gritar “basta” para después susurrar “más”. Ayer acabé de un golpe con una temporada en dique seco demasiado larga, puse fin a la sequía con un diluvio universal orgásmico.

Y hoy... hoy me duelen los brazos, las piernas, la espalda... y otras zonas más sensibles jajajaja. Pero no me duele el alma, ni el corazón, ni la cabeza de pensar en cosas imposibles e irreales. Hoy sigo sintiéndome maldita y mi sonrisa es más maldita que nunca. Hoy me siento DE PUTA MADRE, llena de energías renovadas, de positividad, de alegría, satisfecha, llena de placer. Ni tan si quiera me acuerdo de J que fue quien me lo proporcionó, al fin y al cabo fue “favor por favor” y los dos lo sabemos. Hoy me quiero a mí, toda, entera, me amo, me deseo, ¡¡coño, que me quiero mazo!! Jajajaja Y se nota se nota... ya son tres l@s que a estas horas de la mañana me han dicho “qué bien te ha sentado el finde, hoy estás guapísima!”... malditamente guapísima he pensado yo, con una sonrisa pícara malditamente maldita.

¡¡Muy buenos días!!