Porque la vida a veces, por casualidad, te regala momentos inolvidables… porque siempre recodaré las lágrimas de alegría asomando en sus ojos… porque jamás voy a olvidar el abrazo que nos dimos… porque siempre recordaré sus palabras… porque algún día quiero contárselo a él.
Hoy estoy muy feliz y estoy segura de que todo saldrá bien.
Después de pensar que le habíamos perdido…
Le he visto, me dijo.
Ya viene en camino.
… y aunque no es mío, algún día yo seré ella.