martes, 23 de octubre de 2007

Tan sencillo como eso

- ¿Y qué puedo hacer yo?
- Simplemente estar ahí. No lo sé.
- Pero eso no es suficiente.
- No, no lo es. Quizá puedas hacer algo más.
- Pero… ¿qué?
- Pues algo fácil, muy fácil. Sólo tienes que ponerte de frente y abrir un poco los brazos, luego te acercas y los vuelves a cerrar. Aprietas, aprietas fuerte. Ni si quiera tienes que hablar.

A veces hay estados que se pasan con tan sólo un abrazo… algo tan sencillo y tan difícil de encontrar.


Es un hecho cierto y comprobable que el tocarse, la caricia, el "achuchón", son actos reservados prácticamente a las relaciones más intimas y familiares, o situaciones eróticas. Con todo este tabú, nos privamos de algo que puede ser perfectamente natural también en otros ámbitos y resultar milagrosamente sanador, pues está comprobado que el contacto físico, mucho más allá del contenido sexual, tiene poderes curativos y amplia nuestro bienestar emocional. Cuando nos acariciamos o nos abrazamos, llenamos de vida nuestros sentidos y nos reafirmamos como seres vivos.
[…]
La principal barrera que nos impide ser más generosos con las caricias y los abrazos es que ello implica exponer nuestros sentimientos y hacer gala de una sensibilidad que, ni esta de moda ni nos gusta mostrar. Así es que el primer paso para llegar a ser unos buenos "abrazantes" (nótese el parecido con "amantes"), sería abrir nuestro corazón y nuestro cuerpo a todas las sensaciones, olvidándonos un poco de esos molestos sentimientos de vergüenza, timidez, ridículo... que nos coartan y nos alejan del bienestar, y lanzarnos a la aventura de la experimentación.
[…]
Para abrazar solo se necesita, una persona dispuesta a recibir y a mostrar su vulnerabilidad-abrazado y otra, preparada para aventurarse a entregar una pequeñísima parte de si mismo.
Y además...
Estar dispuestos a sacar el niño que llevamos dentro.
Explorar y ponerse en contacto con la parte divina que todos poseemos.
Honestidad y sinceridad.
El abrazo precisa valentía para ser vulnerable, y conlleva el riesgo de que nuestro abrazo sea rechazado o mal interpretado.
El abrazo es asexual, cuidado con abrazar indiscriminadamente a cualquiera.
Afirma y aumenta nuestra capacidad de compartir.
Armoniza los corazones de los amigos.
El abrazo crea cierto tipo de adicción al cariño, al altruismo, la alegría...
Al igual que la risa, ¡es altamente contagioso! Y puede provocar fuertes reacciones de celos en quien nos ve abrazándonos y no se atreve a participar del abrazo.
Un abrazo cariñoso, consolador o juguetón, no es lo mismo ni debe ser empleado igual que el abrazo del amante. El abrazo íntimo es otro tema.
Sea cual sea tu abrazo, que brote siempre del corazón, no de la mente.
Invéntate nuevas y variadas formas de abrazar.
Busca nombres curiosos o divertidos a tus abrazos.
Conviértete en abrazoterapeuta a tiempo completo.
Ten siempre un abrazo "a mano" para ofrecérselo a alguien.
Se observador y prudente con los límites físicos del otro.
No trates de imponer tu visión o tu filosofía a nadie.
Prueba a abrazar del mismo modo, a aquellos que no te caen tan bien, que a los que te resulte más fácil.
Adereza tus abrazos con sonidos, risas, palabras...
Aprende a pedir abrazos para ti siempre que los necesites o desees gozar de ellos.
El alma encuentra muchas formas de expresar lo que uno siente, haz del abrazo una de ellas...

¿¿HACE FALTA DECIR MAS??


*** Raquel, no te arrimes mucho, que me has pegado la sensibilidad ajjajajaa ainssssss ¿sera el otoño o que? ;)

Montaña Rusa

O te comes el mundo o el mundo te come a ti.

Es una montaña rusa... sube, baja, tan pronto me tiene arriba como me lanza de pronto contra el suelo. Así está mi ánimo últimamente. ¿Razones? Todas y ninguna.

Esta mañana sentí que el mundo me mordía los talones, me quería comer. No pienso dejarme, si me quiere comer tendrá que luchar... o al final me lo comeré yo a él.

Esta mañana sonaba Bebe en mi cabeza, “hoy ha calzado tacones para hacer sonar sus pasos...” y me los he calzado. Hoy me he vestido de guerra y estoy dispuesta a ganar la batalla.

Pero tanta decisión se cae al suelo cuando pongo un cd y suenan violines... y luego vuelve a levantarse con la guitarra eléctrica. De nuevo en la montaña rusa. Subo, bajo... río, lloro.

¡¡Qué incontrolables son las emociones a veces!! Intentas controlarlas y cuanto más lo intentas, más te controlan ellas a ti.

Necesito descargarlas. Llevo tiempo diciendo que necesito soltar adrenalina a mansalva, necesito gritar, reír a carcajada, saltar, hacer piruetas en el aire, volar. Quizá subirme en una montaña rusa pero de verdad, de esas con 30 loopins en las que te montas ya cardiaca perdida y de las que te bajas pidiendo una vuelta más. Así es la vida, como montarse en una montaña rusa: te acojonas en la cola y dudas si dar un paso al frente... te pueden las ganas y entonces lo das; te subes al carro. Después empieza el viaje rápido, frenético, gritas, ríes, lloras, te emocionas, subes, bajas, a veces mas rápido, otras mas lento. Y cuando para tienes dos opciones: te arrepientes de haber subido y te juras que nunca más te subirás... o pides otra vuelta más.

¡¡Otra vuelta, por favor!!

PD1: qué lío de post jajajaja hoy no me entiendo ni yo!
PD2: ¿Alguien me puede explicar por qué hoy todo me huele a naranja y a jazmin?
PD3: definitivamente, me estoy volviendo loca :S