"La geisha es una artista del mundo etéreo. Ella baila, canta, entretiene... todo lo que quieras. Lo demás, son sombras. Lo demás, es secreto. ""No le puedes decir al sol "más sol", ni a la lluvia "menos lluvia". Para un hombre una geisha sólo puede ser media esposa... Somos las esposas del anochecer. "
"El corazón perece de una muerte lenta. Se desprende de cada esperanza como si fueran hojas, hasta que un día no queda ninguna... ninguna esperanza. Ya no queda nada. "
"Ella se pinta el rostro para ocultar su rostro. Sus ojos son como el agua profunda. El deseo, no existe para la geisha. El sentimiento, no existe para la geisha. "
Y quién no ha sido, alguna vez en su vida, una geisha. Quién no ha ocultado su rostro con una fina máscara ocultando su verdadera realidad. Quién no se ha negado alguna vez el derecho a sentir, a desear. Quién no ha dejado volar sus hojas, perdiéndolas en el viento. Quién no ha buscado un Danna que la protegiera. Quién no ha bailado, con y para otros, mientras su corazón no latía. Quién no le ha pedido imposibles a la luna.
Pero los ojos no engañan. En su agua siempre quedan hojas secas prendidas al alma. Puedes negar... pero sólo se niega lo que existe, lo que es. Puedes negarte a sentir y a desear... pero no puedes evitarlo jamás, a pesar de que por ello sufras.
Ha de ser dura la vida de una geisha, siempre negándose el derecho a amar.
Esta tarde la he vuelto a ver, si: Memorias de una Geisha.
6 comentarios:
Durísima, diría yo... Aunque los imposibles a la luna creo que se los hemos pedido todos...
Un mundo fascinante, sin duda. La película no me acabó de convencer del todo...
Siempre me ha llamado la atencion estas mujeres..
Me gustaría mirar a una Geisha, en silencio, a los ojos, y ver venir el destino...
Si , creo q todos en algun momento de nuestras vidas nos hemo convertido en gheisas, sacrificando un poco nuestro yo, por los demas, quizas calladamente sin que nadie lo sepa, solo esas noches cuando las lagrimas empapan el alma
Permite que le quite todo el romanticismo, porque me parece que las geishas son una refinadísima forma de esclavitud...
Y tampoco entiendo a los hombres que se permiten la indignidad de tratar a una mujer como si fuera una muñeca que se mueve a su antojo...
Si que es dura la vida de una geisha pero aun lo es más la vida del turrón de Alicante que tiene que ir de duro por la vida cuando todos sabemos que en realidad es muy dulce.
Saluditón forte 500 mg.
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